El volante es uno de los jugadores clave en Millonarios, que se mide este sábado a Equidad.
Rafael Robayo no siempre fue un volante de marca como se le ha conocido en Millonarios. Alguna vez fue delantero e, incluso, se desempeñó durante su juventud como volante de creación.
Robayó llegó a compartir plantel con el hoy atacante del Porto Radamel Falcao García, con quien conformó una pareja anotadora en la Selección Bogotá de comienzos de la presente década.
A García le aprendió gran parte de esa facultad goleadora que hoy lo tiene como figura de Millonarios con seis tantos en la Liga Postobón II. Esta sábado Robayo busca ampliar ese registro frente a Equidad en un partido definitivo para los ¿embajadores¿.
Robayó llegó a compartir plantel con el hoy atacante del Porto Radamel Falcao García, con quien conformó una pareja anotadora en la Selección Bogotá de comienzos de la presente década.
A García le aprendió gran parte de esa facultad goleadora que hoy lo tiene como figura de Millonarios con seis tantos en la Liga Postobón II. Esta sábado Robayo busca ampliar ese registro frente a Equidad en un partido definitivo para los ¿embajadores¿.
Desde que Robayo llegó a Millonarios en el año 2005, le tocó cumplir una función que desconocía: ser volante de recuperación. Una posición a la que ahora le saca todo el provecho.
"Yo era volante de armado y en Millos aprendí a marcar, yo no conocía bien esa posición pero me sirvió demasiado para convertirme en un jugador de dos áreas, algo que poco se ve en el fútbol colombiano", confesó Robayo sin perder la humildad que lo caracteriza pero con un toque de satisfacción.
"Yo era volante de armado y en Millos aprendí a marcar, yo no conocía bien esa posición pero me sirvió demasiado para convertirme en un jugador de dos áreas, algo que poco se ve en el fútbol colombiano", confesó Robayo sin perder la humildad que lo caracteriza pero con un toque de satisfacción.
Gracias a ese conocimiento de las dos funciones, marcar y crear, Robayo logra recuperar la pelota en su propio terreno para crear, ubicarse en posición de gol y anotar, una condición que no vivía desde sus inicios como futbolista.
"Cuando estaba en la Selección Bogotá yo marcaba un registro de 10 o 12 goles en torneos nacionales y mi compañero Falcao García siempre me ganaba, anotaba 14 o 16", confiesa Robayo con algo de satisfacción. Hoy su amigo de juventud triunfa en Portugal y Robayo lo hace en Millonarios, donde vive su mejor momento deportivo.
"Creo que es mi mejor etapa, porque mantengo un buen rendimiento para el beneficio del equipo y además estoy haciendo goles, siempre había anotado un máximo de tres y este semestre ya doblegue ese registro, seguiré trabajando para convertir mas, aunque no olvido que lo más importante es que el equipo gane.", confesó el volante número 8 de Millonarios.
"Cuando estaba en la Selección Bogotá yo marcaba un registro de 10 o 12 goles en torneos nacionales y mi compañero Falcao García siempre me ganaba, anotaba 14 o 16", confiesa Robayo con algo de satisfacción. Hoy su amigo de juventud triunfa en Portugal y Robayo lo hace en Millonarios, donde vive su mejor momento deportivo.
"Creo que es mi mejor etapa, porque mantengo un buen rendimiento para el beneficio del equipo y además estoy haciendo goles, siempre había anotado un máximo de tres y este semestre ya doblegue ese registro, seguiré trabajando para convertir mas, aunque no olvido que lo más importante es que el equipo gane.", confesó el volante número 8 de Millonarios.
Robayo no sabe cuanto tiempo más permanecerá en Millonarios, muchas veces ha estado a punto de marcharse y finalmente se ha mantenido.
"Mi idea es irme de Millos pero dejando una huella y con la bendición de Dios la dejaré para después partir.", manifiesta un optimista Robayo quien sueña con actuar fuera del país tal como lo hace su amigo de infancia Radamel Falcao García, pero primero quiere clasificar con su equipo a los cuadrangulares finales.
"Mi idea es irme de Millos pero dejando una huella y con la bendición de Dios la dejaré para después partir.", manifiesta un optimista Robayo quien sueña con actuar fuera del país tal como lo hace su amigo de infancia Radamel Falcao García, pero primero quiere clasificar con su equipo a los cuadrangulares finales.
Pablo RomeroRedactor de EL TIEMPO
pedrom@eltiempo.com.co
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